Nadie, por más suertudo que sea, está libre del riesgo de sufrir un accidente. Por nuestra experiencia de más de 50 años luchando por víctimas de lesiones en 30 jurisdicciones de los Estados Unidos, incluidas Nueva York y Connecticut, sabemos que los accidentes ocurren y pueden dejar consecuencias graves para las víctimas y sus familias.
Una de esas consecuencias es la pérdida de ingresos por la incapacidad para trabajar. Un accidente de auto, de moto, de trabajo o un accidente de construcción pueden dejar lesiones graves que le impiden a las víctimas trabajar durante un tiempo, o incluso permanentemente. Esa condición es conocida como incapacidad, o disability en inglés.
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Cuando una persona se lesiona por culpa de otro y esas lesiones no le permiten volver al trabajo, estamos hablando de una incapacidad por la que podría recibir una compensación. Existen varios tipos:
Ocurre cuando una persona no puede trabajar en absoluto por las lesiones derivadas de un accidente de tránsito, un accidente laboral o por otro tipo de negligencia de un tercero. Por ejemplo, si una persona se quiebra ambas manos en un accidente y requiere cirugía, queda temporalmente incapacitado para el trabajo, pero es muy posible que, en unos meses, esa persona se recupere y pueda retomar su vida laboral.
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Este tipo de incapacidad pasa cuando una víctima de accidente en Nueva York sufre una lesión que le impide ejercer algunas de sus actividades cotidianas en el trabajo, pero no todas las actividades. Por ejemplo, si una persona se quiebra una de sus manos, es posible que pueda seguir ejerciendo algunas de las tareas que normalmente hace en su trabajo. Además, eventualmente su mano sanará y su vida volverá a ser como antes del accidente.
Hablamos de incapacidad parcial permanente cuando una persona sufre una lesión que quedará ahí por el resto de su vida, pero esa lesión no le impedirá realizar todas, sino algunas, de sus actividades laborales. Por ejemplo, si una persona pierde un brazo en un accidente, ese brazo no volverá y su desempeño en el trabajo no podrá ser el mismo. Sin embargo, eso no significa que no pueda trabajar en absoluto: aún sin un brazo puede ejercer una variedad de trabajos, oficios y profesiones.
Una persona que reciba un diagnóstico médico de incapacidad total permanente no podrá volver a trabajar por las lesiones derivadas de un accidente en Nueva York. Por lo general, las víctimas de accidentes que quedan completamente incapacitadas sufrieron lesiones graves en su cerebro o en su médula espinal, y esa lesión les impedirá trabajar por el resto de su vida.
El monto de la compensación para una persona que resulte incapacitada por culpa de un accidente dependerá de varios factores. El primero es el tipo de incapacidad y el tiempo que dure la misma: no es lo mismo quebrarse un brazo que puede sanar en unos meses que una lesión que obligue a los médicos a amputar una extremidad.
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Otro factor importante es el tipo de accidente. En los casos de accidentes de auto o de moto, por ejemplo, el monto de la compensación por incapacidad está determinado por la cantidad de dinero que cubra el seguro.
En los casos de accidentes de trabajo, el seguro de compensación laboral cubrirá dos terceras partes de los salarios perdidos (antes de la deducción de impuestos) mientras dure el tiempo de la recuperación.
Si la incapacidad es permanente, la compensación dependerá de otros factores, como la edad de la víctima, el tipo de trabajo que desempeñaba (si era un trabajo manual o que requería de esfuerzo físico, como es el caso de los trabajadores de construcción) y el salario que ganaba antes del accidente.
En cualquier caso, lo más importante es recibir un tratamiento médico completo y oportuno y consultar cuanto antes con nuestros Abogados de Confianza en Nueva York.
Abogados de Confianza es una marca en español del bufete Proner & Proner, una firma legal con más de 50 años de experiencia ayudando a víctimas de accidentes en Nueva York y más de 30 jurisdicciones de los Estados Unidos.
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